Lo más bonito de ser fotógrafa de bodas es encontrarse con parejas tan maravillosas como Eluska y Aitor, que desprendieron emoción y amor desde el minuto cero del día de su boda. Empezamos el día en el Hotel Palacio de Yrisarri donde se vistieron los novios (Eluska de Married Irun y Aitor de Marché) y ya pasamos el resto del día en el mirador de Yrisarri, con uno de los paisajes más espectaculares en los que he trabajado nunca. Siempre es muy agradable empezar el día junto con Naiara y Arkaitz (de Noare Films), que grabaron el vídeo del día, y con Raquel Arocena, que vino como segunda fotógrafa.
A cargo de la ceremonia estuvieron dos de las amigas de Eluska, Maialen y Marina, que hicieron de ella algo personal e íntimo, con la colaboración de todos los que participaron en ella: el aitatxo de Eluska, la hermana de Aitor y un amigo de cada uno de los novios leyeron emotivos y divertidos discursos. Además de todo esto, la hermana de Eluska al piano interpretó algunas piezas tanto para la entrada de los novios como para finalizar la ceremonia, acompañada de dos cantantes estupendos que nos pusieron los pelos de punta. Fue una ceremonia increíble, personal y única.
Con un entorno tan bonito no es que hiciese falta gran adorno, pero Julia Tellechea lo embelleció todavía más con su altar y con el precioso ramo de la novia. En ese mismo entorno realizamos la pequeña sesión de pareja y después el banquete, todo al detalle gracias a las wedding planner de Marta Álvarez.
En definitiva fue un día precioso, pero sin duda fue gracias al ambiente tan bonito que había, gracias a los dos por incluirnos y a vuestra familia y amigos por tenernos como uno más de la celebración. Espero que las fotos que podréis ver a continuación reflejen eso y más, os recomiendo que las veáis escuchando esta preciosa canción que sonó en la ceremonia.